Un Poco Más De Lo Mismo

Hoy lunes 28 de abril del 2008, los estudiantes presentaron una evaluación de los temas 13 y 14 referentes a la evolución y diversidad; el profesor les dijo que esta era en pareja, y me pidió que por favor copiara las preguntas en el pizarrón y él las iba dictado. Las preguntas fueron 5, de las cuales ninguna fue de interpretación, sino, todas de definición. Cuando termino de dictar se quedo parado observando a los estudiantes. Algo que me llamó mucho la atención fue la actitud de los estudiantes con respecto a la prueba, de 14 parejas que había, la mayoría estaba hablando de los amigos, novios, peleas, pero nada referente al examen, pasado un rato fue que comenzaron a desarrollarlo. Una de las pajeras (las dos hembras), se la pasó todo el tiempo dibujando letras en la pared con el borrador del lápiz, por cierto una de ellas fue la que grito por un buen rato la clase del lunes 21 de abril. La otra pareja se dividió el examen, y sólo dos estudiantes fueron las que se concentraron en este. Yo llegue a pensar que su comportamiento era porque no sabían nada y querían copiarse, pero estuve observando, y no vi nada extraño. Otra de las cosas que note fue, la mala manera en que respondía el profesor cuando los estudiantes le hacían una pregunta, ya que los gritaba, citando un ejemplo, uno de los chicos le pregunto un ejemplo de la teoría sintética y él le grito diciendo “yo no estoy preguntando ningún ejemplo, vaya y se sienta”, el estudiante agacho la cabeza y se fue. Varios de ellos me pidieron ayuda y yo los orientes. Pasaron las dos horas de la prueba y el profesor las recogió.


El miércoles 30 de abril me encontré otra vez en el liceo, este día correspondió a laboratorio; esta la segunda vez que asistó al laboratorio, y no se diferencia mucho del primero, puesto que al llegar a este el profesor dijo “práctica número 12 resuelvan la parte teórica que todo está en los libros” los estudiantes comenzaron a copiar, pero, más era lo que hablaban que lo que escribían. Yo pase por cada grupo y les pregunte que si había dudas y les explique; en ese tiempo el profesor corrigió unos trabajos, que por cierto note que no leía, sólo colocaba el símbolo del bien; cuando llegó el momento de montar la práctica (tipos de sangre), el profesor busco la participación de tres estudiantes para que se pincharan el dedo, con el fin de obtener muestras de sangre; yo ayude a recoger las muestras. Fue el profesor quien agregó los tipos de sueros, las monto y enfocó con el microscopio. Cuando él llamó a los estudiantes para que observarán, se acercaron muy pocos, además ninguno demostró inquietud o asombro en lo que notaron; nadie preguntó. Cuando le toco calcular el número de casos con el mismo tipo de sangre yo les explique como se hacia el primero y luego ellos hicieron el resto. Observe que les cuesta las preguntas de análisis, ya que el manual habían algunas y era donde más se les dificultaba y eso era con todos , ellos pidieron que yo les explicara porque al profesor no le entendían nada, yo con mucho gusto lo hice colocando varios ejemplos y ellos agarraron la idea de una vez y comenzaron a opinar; el profesor se torno molesto y cuando ellos comenzaron a plasmar la idea me llamó y me dijo que a ellos no había que darles confianza y que además no sabían ni hacían nada, en ese momento tocaron el timbre para salir porque se iba a realizar un simulacro de un terremoto en la institución.


Tal vez, cuatro clases no son suficientes para definir el modelo de enseñanza y aprendizaje como tradicional; pero algo que si es cierto, es que aquí los estudiantes son entes pasivos, ya que se limitan a copiar y a almacenar información. El profesor colocó una barrera entre él y ellos, cosa que no permite que los estudiantes participen en la clase, cuando busco la intervención de ellos me responden cosa como: no sé nada, me da pena. Respecto al profesor, no cambia la estrategia, es un dador de clases; quizás una de las razones, es que fue formado y ejerció su profesión en un modelo tradicional y por tanto se resiste al cambio. Otra es, el sentirse muy desmotivado por la actitud de los estudiantes hacia su asignatura. Es muy negativo y por eso todos los estudiantes tienen un estigma que dice “no sirves para nada”, tal es su negativismo que al escuchar a un estudiante opinar algo, en lo cual tiene razón, se molesta y los grita. Para él todos los estudiantes son iguales, en el sentido, cree que todos llevan el mismo ritmo de aprendizaje por lo que si un estudiante entiende algo supone que el resto también, o si un estudiante presenta un problema, para él, todos lo tienen; claro, no hace nada para ayudarlos, sólo ve la vertiente negativa de estos.